La psicología analítica aborda la psicoterapia desde la tradición de Carl G. Jung.

Qué distingue esta psicoterapia

Se distingue por un énfasis en el papel de las experiencias simbólicas en la vida humana, adoptando un enfoque prospectivo de los problemas presentados en la terapia.

Esto significa que, si bien la historia vital es de gran importancia para comprender las circunstancias actuales, estas también contienen las semillas para el crecimiento y el desarrollo futuros.

Objetivo del análisis Junguiano

El objetivo del análisis junguiano es lo que Jung denominó individuación. La individuación se refiere al logro de un mayor grado de consciencia sobre la totalidad de las experiencias psicológicas, interpersonales y culturales de la persona.

El papel del analista es ayudar a facilitar el proceso de individuación

proporcionando un entorno interpretativo fidedigno para comprender las experiencias vitales del individuo.

Psicoterapia Junguiana

Jung identificó dos niveles profundos de funcionamiento psicológico que tienden a moldear, colorear y, a veces, comprometer la experiencia vital de una persona.

Junto con Freud, Jung reconoció la importancia de las experiencias vitales tempranas y los complejos personales que emergen en las perturbaciones de la vida de la persona, todos los cuales se encuentran en el inconsciente personal.

Sin embargo, la percepción particular de Jung fue su reconocimiento de que los individuos también están influenciados por factores inconscientes que se encuentran fuera de su experiencia personal y que tienen una cualidad más universal.

Estos factores, a los que denominó arquetipos, integran lo inconsciente colectivo y dan forma a las narrativas, mitos y fenómenos religiosos más universales que moldean el contexto más amplio de la experiencia humana.

El proceso analítico tiene como objetivo traer estos factores, tanto personales como colectivos, a la consciencia, permitiendo al individuo ver más claramente qué fuerzas están en juego en su vida.

Este es el proceso de individuación, que tiene el objetivo más amplio de proporcionar al individuo los recursos para dar forma a su vida en el futuro. Implícito en la comprensión de Jung de los arquetipos en particular está el sentido de una meta hacia la cual se puede dirigir la vida.